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Liga Mayor

La mujer en el fútbol americano

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REUTERS / Lucy Nicholson

Ya nada más de entrada, escuchar de mujeres en el fútbol americano pareciera como que algo no está bien o no concuerda, pero es todo lo contrario. La mujer juega un papel muy importante en este rudo deporte, así, con toda su delicadeza y aparente fragilidad, la mujer juega diferentes roles, todos muy importantes en el deporte de las tackleadas.

LA MADRE

Primeramente, en las categorías infantiles el papá es el más entusiasta en llevar a su hijo el primer fin de semana a los entrenamientos, total, sólo se tiene que levantar, unos pants, su gorra y listo, hasta lleva la cámara para tomarle fotos a su retoño, unas semanas después cuando empiezan los entrenamientos entre semana, es la mamá quien tiene que llenar la maleta, pasar por el hijo a la escuela y de ahí corriendo al entrenamiento, en el camino casi a fuerzas le da de comer, lo baja del coche, se fija que lleve toda la utilería, aprende muy rápido que dentro de la utilería no hay panzera, ni concha, se queda con la preocupación de que no le vayan a pegar “justo ahí”.


Durante el entrenamiento se queda echando chisme con las otras mamás, la hace de aguadora a medio entrenamiento, si llueve saca una toalla para que el chamaco no le llene de lodo el coche, etc., etc.

LA PORRISTA

Otro rol de la mujer es embellecer el campo de juego, al igual que los jugadores se la pasan entrene y entrene, llueva, haga sol, granice, viento con tierra, no importa, a ellas las mandan lo más alejado que se pueda, en el estacionamiento, en la orillita del campo, brincan, corren, practican, se caen, se lastiman, pero eso sí, el día del juego llegan desde temprano con sus uniformes bien limpios y planchaditos, con todas las ganas de animar a su equipo y así lo hacen sin importar el marcador, como “premio” las pasan de madrinas a medio tiempo a que unos sudorosos y cochinos jugadores les den la mano y eso sí, no se salvan de su beso en la mejilla por parte de los capitanes del equipo contrario.

LA JUGADORA

Por allá a principios de los años 80, tuve la oportunidad de ver a dos niñas equipadas en medio de puros niños, una jugaba en Bucaneros, la otra me parece que en Destroyers, en categoría Tiny Tot, los jugadores de otros equipos y categorías se amontonaban junto con algunos padres y mamás a ver si era cierto, las niñas equipadas  y sus colitas en el cabello llamaban la atención y se escuchaban comentarios de todo tipo “¿cómo se les ocurre?” “esto es para hombres, no para niñas” “las van a hacer machorras”, en fin, poco a poco las mujeres han ido ganando terreno dentro del campo de juego, algunas equipadas hasta en categoría juvenil, como ejemplo nuestra medallista de Oro en tiro con arco Aida Román quien jugó en el equipo de la Prepa No. 7 de la UNAM, o que me dicen de nuestros equipos representativos femeniles de Flag Football, siempre el equipo a vencer en el país en que se paren.

LA PERIODISTA O COMENTARISTA

Desde varios años en diferentes medios de comunicación la mujer se abrió paso también para escribir y comentar sobre el futbol americano, de hablar y escribir desde su punto de vista y aspectos paralelos a las tackleadas, hasta manejar estadísticas, marcadores y pronósticos, siempre profesionales, en el campo, afuera de los vestidores esperando a los jugadores, algunas veces desde la tribuna, le vinieron a imprimir un sello personal a la narrativa de las intercepciones y los touchdowns, bien vale la pena mencionar algunos ejemplos de aquellas que surgieron y estuvieron en su momento muy cercanas a nuestro futbol americano, me vienen a la mente los nombres Margarita Alonso, Gaby “McMahon” Fernandez de Lara (quien por cierto jugó muchos años tocho banderola) y Georgina “Goga” Ruiz Sandoval (Actual comentarista de ESPN).

LA AMIGA Y LA NOVIA

No están dentro del campo, difícilmente lo pisan, pero en muchas ocasiones son un gran motor de este deporte, por ellas, muchos se la pasan las dos o tres horas del juego metiendo la panza, celebrando hasta la más mínima asistencia de tackleada, o festejando cada yarda que se avanza, hay desde las que llegan con el jersey del galán bien puesto y con su nudito en la cintura, la que va de pants playera y gorra, hasta la que se va al estadio con unos jeans súper ajustados, el escote justo en el límite para que el que vende las alegrías no vea de más, sus lentes obscuros y dentro de su bolsa dos o tres revistas para no aburrirse durante el juego, algunas llegan con la suegra o la casi suegra, otras se llevan a sus amigas para que se den su taco de ojo, algunas llegan solas, ven y disfrutan todo el juego y después de la ultima porra se van como llegaron, solas.

Acabando el juego, la de pants, la fachosa, la que fue con tacones, la del escote, la del jersey, todas, como ramillete de flores, afuera del coliseo esperan a sus gladiadores, unas para consolar, otras para felicitar, otras más, tan solo para saludar, aunque sea a la distancia, mientras él se va seguramente con la del escote.

Gracias a TODAS de parte de todos, por dejarnos verlas, por alegrar la tribuna, por apoyarnos y por compartir la pasión del FOOBALL

Gracias por leerme, me pueden seguir en Twitter @TercerayOcho y recuerda…

“3 y 8 por avanzar, todo mundo espera pase, pero la decisión es tuya!! Cuestión de estrategia”

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